Para comenzar,
consideremos un sistema que no experimenta ningún cambio, bajo estas
circunstancias, todas las propiedades se pueden medir o calcular en el sistema,
permitiéndonos describir por completo el estado del sistema.
En un estado
específico, todas las propiedades del sistema tienen un valor fijo, y si se
cambia el valor de una propiedad, el estado cambia a otro diferente.
La termodinámica
trata con estados de equilibrio, la palabra equilibrio hace referencia a un
estado en balance. En un estado en equilibrio no hay potenciales
desbalanceados, es decir fuerzas impulsoras dentro del sistema, por lo tanto,
no experimentará cambios, ya que está aislado de sus alrededores.
Hay muchos tipos
de equilibrio, y un sistema no está en equilibrio termodinámico a menos que se
cumplan las condiciones de todos los tipos necesarios de equilibrio, es decir
equilibrio térmico, mecánico y químico.
Por ejemplo, un
sistema se encuentra en equilibrio térmico si se tiene la misma temperatura
dentro de él. Es decir que no existen fuerzas impulsoras, en este caso
diferencias de temperaturas que produzcan un flujo de calor.
Para el caso del
equilibrio mecánico, este se relaciona con la presión, se dice que un sistema
está en equilibrio mecánico si no experimenta variaciones de presión.
La variación de los sistemas debido a la gravedad es relativamente pequeña, por lo que generalmente se ignora. Si un sistema cuenta con dos fases, se dice que se encuentra en la fase de equilibrio cuando la masa de cada fase alcanza un equilibrio y permanecen allí.
Por último, un sistema se encuentra en equilibrio químico si su composición química no cambia con el tiempo, es decir, si no ocurren reacciones químicas.
Recuerda que un sistema termodinámico no está en equilibrio si no se cumplen los criterios que acabamos de mencionar.
A continuación, video sobre el tema